°°°Julie °°°

Historia original.
Genero:suspenso.
Resumen:
Sara y Richard son una pareja de recien casados que decide mudarse a una hermosa casa en una zona recidencial de San Francisco.
Sara se vuelve ama de casa mientras Richard sale a trabajar por las mañanas, dejandola sola, pero pronto Sara se encuentra y se vuelve amiga de la pequeña Julie, una dulce niña de 7 años que curiosamente, solo es vicible a los ojos de Sara.
Al darce cuenta de que la pequeña guarda un secreto obscuro, decide hacer todo lo posible para descubrir lo que la niña oculta.

muy interesante!! ^^

ya te dije lo que pienso...

^^ parece muy interesante^^

gracias por sus comentarios chicas n_n...
Bella.... sin comentarios respecto a ti lo sabes ¬¬
espero que les guste el primer capi n_n, gracias!!!

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Cap. I
“Mudanzas”

Un carro de mudanzas era guiado por un pequeño convertible rojo atraves de las calles de San Francisco, finalmente llegaron a un fraccionamiento llamado the roses garden.
El lugar era grande y tenia enormes jardines con rosas.
Lo único que desentonaba con aquel lugar de ensueño era una choza al final del fraccionamiento, estaba echa de madera vieja y roída, el pasto de los jardines de ese lugar estaba tan crecido y descuidado que podría llegarle a una persona de estatura media a la cintura.

Un chico alto, pelinegro y de ojos azul turquesa bajo del asiento del conductor del convertible y cruzo para abrir la puerta del copitloto.

-¿le ayudo señorita?- le dijo en tono de broma a su esposa tendiéndole la mano
-claro- rio la mujer y le dio la mano.
Cinco minutos después el camión de la mudanza llego.

La pareja entro de la mano a la casa, mientras Richard le indicaba al equipo de mudanza como y en donde acomodar las cosas, Sara se dedico a mironear por la casa libremente.
La casa era grande y de paredes blancas, constaba en un living en el cual se encontraban las escaleras para el piso superior en el cual había tres recamaras, dos baños, un salón de juegos y una gran y amplia terraza.
En el piso inferior estaban, el living, la cocina, la sala y el comedor .
Sara se encontraba en una de las habitaciones, la ultima del pasillo, esa recamara tenia la mejor vista de todas, por que se podía ver el parque de juegos del fraccionamiento desde ahí; mientras miraba por la ventana a los niños pequeños jugar , escucho un ruido sordo en el closet del cuarto.
El ruido la sobresalto, al principio no supo que hacer, así que solo se quedo mirando, pensando en que tal vez solo había sido su imaginación.
No volvió a escuchar aquel ruido; cuando estaba por salir del lugar el ruido volvió a escucharse, pero con mayor fuerza.
Sara se paro en seco y dio media vuelta, se acerco al closet y abrió la puerta de golpe, pero lo único que había en ese lugar eran vestidos, cerca de 10 hermosos vestidos para niña; Sara los miro con ternura, imaginando que seguramente habían pertenecido a la hija mas pequeña de las personas que le habían vendido la casa, quizás los hubieran olvidado…
Volvió a cerrar la puerta del closet y salió sonriente de la recamara.


Esa noche Sara tuvo un sueño extraño, soñó con una niña pequeña, ella miraba por la ventana de la recamara al final del pasillo, la pequeña tenia uno de los vestidos puestos, era un hermoso vestido color lavanda, con bordados verde esmeralda. La niña tenia el cabello largo, lacio y de un rojo intenso.
Sara camino hasta ella y le toco el hombro, la pequeña la miro y en su expresión pudo ver algo sombrío, pero lo que le dejo fría fue el darse cuenta de que esa niñita era ella misma, cuando tenia cinco años.
La pequeña continuaba mirándola de la misma manera, y un ruido sordo se escucho en el closet, de la misma manera en que le había ocurrido a Sara aquella mañana; ambas miraron al mismo sitio, los ruidos se hacían mas sonoros y constantes, Sara camino y se paro frente al lugar del cual provenían los ruidos, tomo la perilla, dudando, miro asia atrás y la pequeña había desaparecido.
Abrió la puerta de golpe y una masa deforme llena de un líquido viscoso cayo sobre ella.


-¡Sara!, ¡Sara despierta! – Richard tenia a su esposa envuelta en sus brazos, la agitaba ligeramente para intentar despertarla, Sara movía los brazos y gritaba – Cariño, despierta, debes despertar-
Sara abrió los ojos y dio un salto brusco, estaba empapada en sudor.
-¿Qué ha pasado?- pregunto mirando a su alrededor.
-creo que tenias una pesadilla- le respondió Richard mientras la liberaba de su abrazo
- lo siento, no se que me paso- se disculpo mientras se tomaba la cabeza.
-descuida, sabes que esas cosas no se pueden controlar- le respondió Richard mientras acariciaba su mejilla – descansa, son las 4:34 – le beso la frente y luego los cubrió a ambos con las sabanas.
Esa noche Sara no pudo volver a dormir.


La mañana siguiente todo fue mas tranquilo, mientras Richard tomaba una ducha Sara le preparaba el desayuno alegremente.
-buenos días cariño – Richard le susurro al oído mientras la abrazaba por la cintura –huele delicioso-
-buenos días señor Grayson- le respondió ella divertida – gracias es el especial de la casa huevos con tocino y jamón-
-felicíteme a la chef por favor-le tonteo el
-esta bien, le daré sus elogios –

Ambos tomaron el desayuno bromeando felizmente y ninguno menciono el incidente de la pesadilla, cuando Richard se fue al trabajo se despidió de Sara con un dulce beso y prometió volver pronto.
La mayor parte de la mañana Sara se dedico a plantar unas cuantas plantas en su reducido pero bonito jardín; cuando termino entro a la casa y comenzó a preparar la comida, estaba picando verdura cuando escucho ruidos en el piso de arriba, empuño el cuchillo con fuerza y subió sigilosamente las escaleras ; la puerta de su recamara estaba abierta cuando se suponía debía estar cerrada.
Sus manos comenzaron a sudar y ella empuño con mas fuerza el cuchillo, entro bruscamente en la habitación y se quedo parada mirando a la cama.
Una niña estaba sentada ahí y la miraba alegremente; aquella niña tenia el cabello corto y de color castaño claro, sus ojos eran grandes y dorados, era de piel pálida y con pequitas en las mejillas.
Estaba sucia, su vestido estaba lleno de lodo y los encajes estaban amarillentos y roídos, no llevaba zapatos.
-¿Quién eres?- le pregunto a la niña
- me llamo Julie- la respondió la pequeña con una gran sonrisa.
-¿como entraste?-
-lo siento, los anteriores dueños me dejaban entrar a jugar con su hija –
Sara se relajo y se sentó a lado de la niña.
-descuida, dime Julie, ¿por que estas tan sucia? Y ¿Dónde están tus zapatos?-
La pequeña se ruborizo y abrazo a Sara por la cintura, comenzó a llorar .
-mis padres me abandonaron, nunca están en casa y …- la niña continuo llorando no pudo seguir hablando; Sara le abrazo fuertemente… no podía evitar sentirse identificada con la situación.
-tranquila querida, tranquila- le acaricio el cabello –ven con migo- le dijo y la cargo en sus brazos para llevarla al baño de su recamara.
La niña no dijo nada en ningún momento, solo sosoyaba; Sara le saco de encima el vestido, (que en algún momento había sido blanco),le quito el resto de su ropita y la metió a la bañera.
-¿Cuántos años tienes Julie?- le pregunto mientras enjabonaba el cabello de la niña.
-siete- le respondió en un susurro.
- wow, eres muy guapa ¿sabias eso? –
-Tu también lo eres-
-mi nombre es Sara-le dijo sonriéndole a la pequeña –¿quieres ser mi amiga?
La expresión de la niña se dulcifico y sus ojos brillaron con inocencia.
-¡si!- respondió la niña de inmediato
Ambas rieron, Sara saco a la niña de la bañera y la enredo en la toalla, la volvió a cargar en sus brazos y la llevo a la habitación del final el pasillo y le mostro los vestidos que había guardados ahí.
La niña miraba a su alrededor con familiaridad.
-este solía ser el cuarto de la hija de los dueños anteriores, esos son sus vestidos-dijo señalando al closet.
-¿te gustaría elegir un vestido?-
-¿puedo?-
-claro, ¿tu conocías a la hija de los dueños?-
-si, quiero ese- le respondió señalando un vestido lavanda con bordados verdes, idéntico al vestido que Sara había soñado.- éramos amigas, pero un dia ella solo desapareció….- dijo la niña con inocencia.
Sara ya no respondió nada y le ayudo a ponerse el vestido, busco en el piso del closet y en una caja encontró un par de zapatitos verdes.
Después la llevo a la cocina y le preparo un emparedado y mientras la niña lo comía Sara la observaba, aquella niñita le inspiraba una paz y una confianza que no lograba entender.
La puerta de la entrada se abrió y se escucharon ruidos en el living
-¡estoy en casa Sara!- grito Richard desde la puerta
- enseguida vuelvo- le dijo a la niña que se sobresalto
-hola cariño- saludo Sara mientras se colgaba del cuello de Richard – ven con migo, te quiero presentar a alguien- le dijo jalándolo a la cocina
-ve que hiciste amigas- le respondió celebrando su entusiasmo.
-así es cariño ella es…- al entrar a la cocina esta estaba vacía, un emparedado completo ya hacia sobre la barra.

aqui huela a ...FANTASMAS!!!1wa!!!!!
little m xq bells te dijo "espero que a este si lo termines"!??
tu tambien no terminas lo que escribes!????
choque eso 5 hermana..ya somos dos!!XD je je je

me gusto mucho tu histroria!!!^^ espero leer pronto el siguente cap ^^ je je je
ahora me retiro
bye bye!!^^

n_n, gracias por sus comentarios chicas, los aprecio mucho.
Bueno, como estaba aburrida pues me puse a escibir y aqui esta el segundo capi ^^

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Cap. II
“Sombras ”

-¡te digo que estaba ahí cuando fui al living!- la voz de Sara sonaba desesperada
-esta bien cielo, te creo- dijo Richard recostándose en la cabecera de la cama- tal vez se asusto y salió por el jardín.
-si, puede ser-
-oye, tu día fue muy cansado, ¿por que no dormimos ya?, tal vez mañana Julie te visite de nuevo, si eso pasa dile que quiero conocerla ¿de acuerdo?-
Sara soltó un suspiro.
-lo hare- dijo resignada, por mas que Richard afirmara creerle, ella no podía dejar de sentir que la tiraba de loca
-buenas noches amor – dijo Richard y le beso ambos parpados
-buenas noches-



Sara despertó justo a mitad de la noche, se sentía realmente cansada, pero sentía el implacable impulso de ir a aquella habitación; se puso de pie intentando no despertar a su esposo, se puso las pantuflas y salió de su recamara procurando no hacer ningún ruido.
Llego al final del pasillo y se detuvo frente a la puerta, por las rendijas de esta se colaba una fina luz blanca, que obviamente, no era la luz de los focos.
Extrañada, Sara abrió la puerta y entro.
Ahí estaba ella, su versión infantil; la habitación estaba completamente distinta, la cama tenia un edredón rosado y había peluches por todos lados, en el centro del cuarto había una mesita de te; no estaba sola, Julie también estaba presente.
Ambas niñas miraron a Sara y le sonrieron, ella también sonrió confundida; las niñas se pusieron de pie y corrieron a ella, cada una le tomo una mano y la sentaron en una de las sillas de la mesita del te.


Las niñas jugaban alegres mientras Sara las observaba en silencio.
-Sara- hablo Julie- ¿ no probaras tu te?
-claro- dijo saliendo de su anonamiento, dio un sorbo a su taza- esta rico…¿Qué es?
-sangre- respondió Julie inocentemente

Sara escupió el sorbo que acababa de darle al te, miro su taza y un espeso liquido de color rojo intenso apareció ahí; Sara soltó la taza asustada, las pequeñas la ignoraban y continuaban jugando.
En la ventana se escucharon golpecitos, Sara se levanto para ver que era lo que golpeaba; afuera era de noche, el parquecito estaba vacio, pero un columpio se movía como si alguien jugase en el.
Ella miraba confundida, y los golpes del closet volvieron a resonar en la habitación, Sara se volteo de inmediato y todo lo que había visto antes ya no estaba, solo quedaba ella y aquellos golpes.
Se le erizo cada centímetro de la piel, esta vez estaba despierta, lo sabia, esta vez era real; se paro frente a la puerta y la miro, los golpes seguían resonando en la recamara.


-¿Sara?- la voz de Richard sonó en el pasillo, los golpes cesaron.
Trago saliva y asomo la cabeza por la puerta
-¿Qué ocurre?- le pregunto a modo de respuesta
-¿Qué haces a estas horas ahí?-
-insomnio- respondió automáticamente


Richard camino hasta ella, le abrazo por los hombros y la apreso en su pecho, la beso dulce y pasionalmente, el beso se prolongo, a Sara le hervía la sangre, tomo a Richard por la nuca y lo acerco mas a ella, las manos de Richard bajaron asta su espalda baja y atrajo su cuerpo aun mas, sus labios chocaban impacientes y sus respiraciones se volvían entrecortadas, Richard la apretó contra la pared y la cargo por los muslos, sus manos recorrían capa parte del cuerpo de Sara, el contacto con su piel ardía como fuego.


Sara abrió los ojos lentamente, Richard estaba a su lado, contemplándola.
-buenos días- le saludo con una sonrisa.
-buenos días- le respondió ella con tono somnoliento
-¿dormiste bien linda?- le pregunto mientras jugueteaba con su cabello
-si… parece que anoche tuvimos una fiesta- dijo refiriéndose a la ropa que estaba esparcida por el piso de la habitación.
-si, bueno…deberíamos hacerlo con mas frecuencia- le bromeo
-claro- le dijo mientras se incorporaba y lo besaba en los labios
Permanecieron abrazados por un largo tiempo.


-regresare pronto, y no olvides pedirle a Julie que se quede para cenar- dijo Richard al despedirse de Sara para ir al trabajo, después salió de la casa.
Sara lo vio partir recargada en el marco de la puerta, estando aun envuelta en bata.
-se ven lindos juntos- Sara se sobresalto al escuchar la voz se giro rápidamente y vio a Julie sentada en las escaleras.
-¡Julie!,¿ como entraste? ¿ por que escapaste ayer?- dijo cerrando la puerta y caminando asía la niña.
- Richard me da miedo-dijo la niña mirando al piso
-¿pero por que?- pregunto Sara sintiéndose fuera de lugar
-Todos los hombres me asustan-
El comentario preocupo a Sara
-¿por que dices eso?-Julie no contesto y siguió mirando al piso-esta bien, no tienes que contarme si no quieres- le dijo tomando su pequeña carita entre sus manos.
-¿puedes bañarme e nuevo?- pregunto cambiando la expresión de su rostro repentinamente.
-claro, ven conmigo-


Se tomaron de la mano y subieron a la habitación de Sara y entraron al baño, al igual que el día anterior le quito el vestido y toda su ropa, pro esta vez descubrió algo.
Desde el final de su cuellito hasta la mitad de su espalda, la niña tenia un enorme y horrible moretón, Sara le miro horrorizada.


-¿que te ocurrió?- le pregunto recorriendo con la yema de sus dedos el moretón.
Julie no contesto nada, solo agacho la mirada y se abrazo las piernas.
-¡¿Julie que te paso?!- le pregunto alarmada, la niña agacho aun mas su rostro, Sara le obligo a mirarle tomando su rostro éntrelas manos, la mirada de la pequeña le dejo pasmada.


En sus ojos lucia una expresión maligna y sombría, un frio inusual lleno la habitación, Sara podía ver su aliento; a pesar del que la reacción de Julie le había aterrorizado, sintió la necesidad de protegerla, tomo una toalla, la envolvió y la tomo en brazos, y corrió a la puerta del baño, pero la puerta no abrió.
Tiro de la manija con todas sus fuerzas, pero no obtuvo resultados; las paredes se llenaron de moho y un agua verdosa comenzó a escurrir por ellas.
Sara abrazo fuertemente a la niña, que oculto la cabeza en el pecho de ella.


-no tengas miedo- susurro Julie- todo estará bien, no te lastimara-
La habitación comenzó a recuperar su habitual temperatura y las paredes regresaron a la normalidad.
-¿que dijiste?-
-Sara…¿quieres ser mi mama?- le pregunto la niña inocentemente señalando el vientre de Sara.
-¿Qué, Julie que es lo que pasa? – le exigió
-nada- la niña se deshizo del abrazo de Sara y se quito la toalla, tenia puesto ya un hermoso vestido blanco, idéntico al que tenia puesto la primera vez que Sara la vio- debó irme, nos veremos después- y dicho eso, la niña salió corriendo, Sara la siguió, pero cuando llego a las escaleras la casa estaba vacía.

Sara se encero en el cuarto de juegos y comenzó a llorar aterrorizada.

por que si te consco desde hace como un año.... es la primera vez que leo algun escrito tuyo?.. y no, el mesenger no cuenta ¬¬

bueno, pz cre qu te esta quedando bien, normalmente esperaria leer de ti algo mas... romantico, no sabia que te gustara escribir suspenso, pero bueno......... adelante!

hihihi XD, weno, si no es que jamas te intereo leer algo mio, me sorprende verte aqui Dean... en fin....
GRACIAS MEL!!!, no me cansare de decirtelo... gracias!!! XD
aqui el tercer capitulo....
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Cap III
“Memorias”




Había pasado ya un mes desde la última vez que Sara había visto a Julie; aquella tarde Richard la había encontrado inconsciente en el cuarto de juegos, sin embargo, muy a pesar de ella, decidió no contarle nada a su esposo, pues ella había comenzado a convencerse a sí misma de que todo era una especie de alucinación causada por su subconsciente, tal vez fuese su conciencia, o tal vez era que aquel lugar le recordaba la hermosa casa de sus padres, donde había vivido todo su niñez, donde había sufrido los peores traumas psicológicos, aquellos que la habían marcado.




Sara había crecido en el ceno de una familia pudiente, su padre había sido un exitoso empresario, dueño de una agencia de modelos; su madre había sido por mucho tiempo la cara de esa empresa de modelos; fueron una familia feliz, hasta que Sara nació, arruinando el precioso cuerpo de su madre.

Desde entonces, su padre comenzó a buscar una nueva cara para su empresa y de paso para llamarla amante; cuando Sara cumplió los tres años, su padre las abandonó, por una chica más joven, bronceada y alta que su madre; a partir de entonces, Sara fue nombrada la causa de todas las desgracias de la madre; la señora comenzó a beber y a tomar antidepresivos, fumaba como chimenea y abandonaba a su hija por periodos largos, (por fortuna para la niña, los vecinos solían cuidar de ella) y cuando estaba en casa, normalmente se encerraba en su habitación a llorar después de gritarle a la niña que todo era su culpa; cuando la pequeña Sara cumplió los 11 años, encontró a su madre colgando "graciosamente" de el techo de su baño; después de eso vivió en una casa hogar hasta los 18, busco un empleo y encontró uno como camarera de un restaurant lujoso en la zona rica de San Francisco, fue ahí en donde conoció a Richard…



Sara dejo de tener esos sueños extraños, pero el hecho de que Julie hubiese desaparecido, no significaba nada, no si ella aun podía sentir su presencia, e incluso en ocasiones le parecía escuchar su risita, pero no, ella sabía que eso no era posible, ella simplemente sabía que era imposible y decidió mantener esa creencia.

Sin embargo, una noche, cuando Sara se preparaba para una fiesta, a la que Richard había sido invitado, encontró sobre su mesita de noche una foto, al ver la foto, Sara se quedo sin palabras, pues en esa foto estaba ella, pero no estaba sola, Julie estaba con ella, estaban abrazadas de una forma en la que cualquier persona que viese la foto creería que eran madre e hija, Sara contemplo la foto a detalle con el ceño fruncido, había algo en aquella foto que a Sara le parecía extraño, pero no estaba segura de que .

-¿estas lista cariño?- le pregunto Richard mientras salía del baño atándose la corbata, Sara no respondía, seguía mirando el pedazo de papel.-
¿Qué tienes ahí?- pregunto Richard acercándose y tomando la fotografía, la miro sorprendido por unos minutos – pensé que no tenias fotos tuyas de pequeña ¿es tu madre?- le dijo.
-¿Qué dices?- Sara se exalto sin comprender realmente, le arrebato la foto y al mirarla, fue eso lo que vio, ella, a la edad de 7, con su madre - si… es mi madre- le respondió con la expresión vacía, la boca se la había secado, y comenzó a sentir calor en la espalda y la boca del estomago - Richard, ¿los antiguos dueños de la casa estarán en la fiesta?-
-sí, eso es lo que me han dicho, ¿Por qué?-
-solo…me gustaría hablar con ellos sobre unos cuantos detalles insignificantes que he notado- respondió metiendo la fotografía a su bolso.



La fiesta era en un salón lujoso, grandes ramos de toda clase de flores blancas adornaban las mesas y las paredes, varias personas se encontraban de pie platicando entre sí, Sara distinguió a lo lejos al matrimonio Roth y le pidió a Richard el acercarse a ellos.

-Señor Roth, es una alegría verlo aquí- dijo Richard cuando estaban a unos pasos de distancia
-¡Richard, Sara!- grito alegre el aludido alzando los brazos.
-Buenas noches, es un gusto verlos de nuevo- saludo Sara con una sonrisa
-el gusto es nuestro querida, luces estupenda- elogio la señora Roth
-muchas gracias, señora Roth, ¿le gustaría dar un paseo por el jardín conmigo?- le propuso Sara

-claro, me encantaría- le respondió entusiasmada -caballeros- se despidió y tomo a Sara por el brazo, encaminándose juntas al jardín.

- Debo suponer, que me has pedido salir porque ha algo de lo que quieres hablar ¿cierto?-Sara sonrió
-es usted muy perspicaz señora Roth-
-llámame Rachel por favor, y bien, ¿de qué se trata? ¿ tienes problemas con Richard?-
-no, con Richard va todo muy bien, se trata de la casa- al decir lo último, Sara noto como los músculos de la Señora Roth se tensaban –
-¿Qué pasa con la casa?- pregunto la señora Roth tratando de fingir indiferencia
-eso es precisamente lo que trato de averiguar- la señora Roth soltó un sonoro suspiro
-escúchame bien Sara, en esa casa, hay algo extraño, lo sé, y lamento no haberlo mencionado cuando cerré el trato de venta contigo, pero debes entender que no podía mencionártelo, lo único que yo deseaba era salir de ese lugar y no regresar nunca.-
-¿pero por qué? ¿Qué es lo que ha ocurrido?-
-en esa casa hay algo Sara, algo que no nos quería ahí-
-lo siento Rachel, pero no se dé que me hablas-
-cuando llevábamos 2 días ahí, las paredes aparecieron manchadas de sangre, se escuchaban ruidos y gritos en el baño, los cuchillos salían volando de sus lugares…- la respiración de la señora Roth se volvió entrecortada y ella comenzó a palidecer- lo lamento, pero de verdad, era una pesadilla, debíamos deshacernos de esa casa maldita.
-Rachel, en verdad no debes preocuparte tanto, nada de eso ha pasado- le dijo para calmarla
-entonces, me haces pensar que lo que sea que nos obligo a salir de la casa, en realidad no está en la casa, si no en nosotros-
-bueno, tampoco creo que sea así, para ser honesta, no creo mucho en esas cosas de fantasmas y casas encantadas-
-deberías creer Sara, porque todas esas “cosas”, son reales, y les estas obligando a demostrarte su existencia, ahora si me disculpas, quisiera entrar de nuevo al salón, la noche es muy fría, ¿vienes?-
-no, gracias, yo prefiero pasear un poco mas – respondió amablemente
-como prefieras, pero no tardes mucho, o podrías resfriarte- dicho eso la Señora Roth se encamino de regreso al salón.

-¡Rachel! Casi lo olvido- grito Sara corriendo para alcanzarla- en la casa, se han olvidado de los vestidos- la señora Roth la miro como si estuviese loca
- ¿de qué hablas linda?-
-en el closet de la última recamara, se olvidaron los vestidos de la nena-
-Sara, esos vestidos no son nuestros, nosotros no tenemos hijos- le respondió mirándola con cautela- ten cuidado Sara- y esta vez se fue sin mirar atrás
Sara la miro partir con el corazón en la mano, algo pasaba en esa casa, ya era más que obvio, pero ¿que tenía que ver una niña que ella misma había imaginado en todo eso?



Otra semana pasó desde esa fiesta y Sara continuaba sin saber de Julie, y sin poder sacar de su cabeza la información que la señora Roth le había dado.
Sara decidió contarle todo lo que le había pasado a Richard, esperando que este le exigiera el divorcio de inmediato, sin embargo, él había tomado las cosas con mucha calma y prometió apoyar a Sara, incluso le propuso mudarse de casa, pero Sara se negó rotundamente.
De algún modo, se había convencido de que todo era real al regresar de aquella fiesta y corroborar que los vestidos de niña seguían en el closet, muy a su pesar, sabía que estaba arriesgando mucho, pero tenía que averiguar lo que ocurría en ese lugar, se había vuelto su pequeña obsesión.

me declarera tu gran fan #1, me gusta como escribes, aunque creo que deverias cuidar un poquitico tu ortografia y cuidado con eso de comerte letras................ de hay en mas, exelente"

querida M!!!!!!!1

muy buenooooooooo!!!!!!
supermegaarchirequetegenial!!!!
^^
me gusto muchoooo
no tardes de subir conti!!1
XD
bye bye

haaaaa....por fin pude escribir este capi... gracias Dean y Lu por sus comentarios, significa mucho para mi que se tomen el tiempo de leer y comentar n.n.
MEL, gracias por las correcciones ... y a un capitulo del final... la nostalgia llega XD
creo que esta sera mi primer obra terminada XD...

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Cap. IV
“Algo mas”

El tiempo pareció detenerse para Sara desde el día de aquella fiesta.

Sus sueños extraños habían regresado, pero ya no soñaba más con Julie; la nueva protagonista era ella misma en el baño de su recamara, en sus sueños, ella solía ducharse tranquilamente en la bañera, hasta que una extraña fuerza la tomaba por los hombros y la sumergía, ejerciendo presión sobre su cuerpo, impidiéndole salir a la superficie por un poco de aire, no importaba cuanto forcejeara, al final, siempre terminaba perdiendo la conciencia, pero en su última visión, una mujer de piel pálida, cabellos rubios y ojos color ocre la observaba a través del agua, con una sonrisa de satisfacción dibujada en sus carnoso labios color carmesí.


Al principio, Sara solía despertar sobresaltada, temerosa de la realidad que aquellos sueños pudiesen contener, pero al pasar el tiempo, termino por acostumbrarse a la sensación pesada que se formaba en su estomago al despertar.


Pasando un par de semanas, Richard tuvo que hacer un viaje de negocios a Barcelona y Sara lo vio partir con gran pesar, aun cuando Richard le había suplicado que viajase con él, ella se había negado; Richard pasaría fuera de la ciudad una semana y ella sabía que si quería llegar a descubrir lo que esa casa ocultaba, esa seria precisamente la oportunidad perfecta, pues sin este cerca, no tendría que preocuparse por la seguridad de este.

Decidió pasar su primera noche, estando sola en el baño, pues ese era el escenario de sus últimos sueños; estaba aterrada, recostada en una esquina sobre un improvisado lecho compuesto por varias cobijas y almohadones, con las luces apagadas y la puerta cerrada, sin darse cuenta comenzó a quedarse dormida.

Un frió anormal comenzó a invadir la habitación.
-¡Sara! ¡Sara despierta!-una vocecilla dulce le llamaba en susurro
Sara abrió los ojos lentamente y un escalofrió (causado por el frió )recorrió su cuerpo.
-Sara, es hora, debes despertar- volvió a llamar la voz de Julie, pero la habitación seguía en completa obscuridad, era imposible ver nada, así que no tenía la certeza de en qué lugar se encontraba la niña.
-¿Julie? ¿Donde estas?- le llamo.
-es hora de despertar Sara-

Mientras Sara se incorporaba lentamente la puerta se abrió de golpe; la luz de la recamara estaba encendida y Julie estaba sentada sobre la cama.
Al verla ahí, Sara se puso de pie y salió a trompicones del baño.

-debes salir- le dijo la niña en cuanto estuvieron frente a frente.
-¿Qué?... ¡no!, debes decirme lo que pasa aquí- respondió firmemente- ¡TE LO EXIJO!-
En ese momento las luces comenzaron a parpadear y las paredes se mancharon de sangre, tal como lo había descrito la señora Roth; en las escaleras se escucharon ruidos como si alguien arrastrara algo realmente pesado cuesta abajo.

-por favor Sara, ¡debes salir!- le pidió Julie tomándole las manos; Sara se estremeció al contacto con la helada piel de la niña- confía en mí- le pidió.
Sara no pudo negarse más, no ante todo lo que ocurría a su alrededor, rápidamente se puso los vaqueros, una chaqueta negra y las botas que usaba para el frió, tomo el celular que estaba sobre la mesita de noche y salió de la recamara, las paredes del pasillo también estaban manchadas de sangre, pero en estas las manchas formaban la palabra
<<¡MÍA! >>

Sara bajo las escaleras velozmente, sentía miradas clavadas en la nuca, como si fuese observada por diez pares de invisibles ojos; resbalo y cayó estrepitosamente de las escaleras, rodando unos cuantos escalones abajo.
Dolorida, se incorporo lentamente, mirando a las escaleras que estaban inundadas, chorreando agua verdosa que comenzaba a adquirir un tono escarlata; Julie la miraba desde el otro extremo de las escaleras.


-¡vete!- le grito a Sara, entonces una sombra surgió a espaldas de la niña- ¡VETE!- Sara estaba en estado de shock, observando como la sombra se abalanzaba sobre Julie; mientras la niña intentaba forcejear, una esfera de luz surgió de su pecho y golpeo a Sara, arrastrándola a la puerta principal, sacándola de casa sin que ella lo deseara, conduciéndola al parquecito del fraccionamiento.


Su boca estaba totalmente seca, miraba atónita a la ventana de la habitación de los vestidos, la luz estaba encendida y a través del cristal se distinguía una sombra, la sombra de una mujer paseando de un lado a otro de la habitación, cargando algo en brazos; la sombra se paró en seco y giro lentamente asía la ventana, se acerco al cristal… la esfera de luz que había sacado a Sara de la casa la golpeo nuevamente y la llevo a un lugar inesperado.

De pronto se encontraba en el jardín de la choza de madera que parecía abandonada desde asía tiempo. Obedeciendo un implacable y repentino impulso comenzó a avanzar entre la hierba crecida. Toco suavemente a la puerta y esta se abrió por sí sola, Sara entro en la casa observando todo muy atentamente.

El interior de la casa era sumamente sencillo. Había una espaciosa habitación con una cocina sencilla, una mesa con cuatro sillas y en el centro tres sillones que daban la impresión de jamás haber sido nuevos. En el sofá más pequeño, de espaldas a la puerta había sentada una viejecilla.


-pasa- le indico con una voz suave y melodiosa.
Sara obedeció y camino a la sala, se para frente a la vieja, que con un gesto le indico que se sentara en el sofá continuo. Por un tiempo ambas permanecieron calladas, mientras la vieja miraba a la nada, Sara le observaba expectante, analizando los rasgos del rostro de la mujer.
Su piel poblada de arrugas parecía suave y tersa, delicada, sus ojos, ocultos tras los pesados parpados eran de un tono grisáceo que daba una mirada clara y profunda, sus labios marchitos ya daban la impresión de haber sido carnoso y abultados en aquel entonces, cuando fueron jóvenes.


-si no me equivoco, estas aquí por Juile- hablo finalmente la anciana
-si- respondió Sara con un susurro apenas audible, la vieja asintió lentamente con la cabeza - ¿Qué es lo que ocurre en esa casa?-
-cada año, desde hace 20 años, ocurre lo mismo-
-¿pero qué es lo que ocurre? ¡No logro entenderlo!- Sara comenzaba a perder la paciencia ante la aparente calma de la mujer.
Por primera vez, la mujer dejo de mirar al frente vacíamente y clavo la mirada en el rostro de Sara.
-tú eres la elegida, por ambas-
-¿elegida? ¡Esto es realmente absurdo! ¡Es una…. TONTERÍA!- grito Sara mientras se ponía de pie y se encaminaba a la puerta, pero cuando intento abrirla, esta, estaba trabada.
La luz volvió a surgir de la nada y arrastro a Sara al sofá.

O_O
suspenso total........no creees que te tardaste ya?????????
que esperas sigue ya con el final!!!!!!!!!!!!!!!!!!!