Luego de que termine de comer subí a mi habitación a leer un rato, despejar mi mente y olvidarme por un momento de lo mucho que extrañaba a Lucas.
Las vacaciones habian llegado y todos los alumnos se habian marchado. Incluido entre ellos, Lucas. Recién habia pasado una semana y ya sentia como si hubiese pasado todo un siglo sin verlo.
Habia veces que deseaba escaparme e ir a buscarlo, pero la verdad es que tampoco sabía con exactitud donde se encontraba. También me pregunto muy seguido si el también piensa en mi, tanto como lo hago yo en él.
Entre en mi habitación y me tumbe en la cama. Pase la mano torpemente por la mesita de luz tratando de encontrar mi viejo libro, el cual leía todas las noches, aunque ya lo hubiese leido cientos de veces. Cumbre Borrascosas. Una de las mejores cosas del libro es que ni Heatcliff ni Linton me hacian acordar a Lucas, asíque podia consentrarme en la lectura sin desviar mis pensamientos hacia él.